En diciembre de 2019, la Policía Federal de Brasil informó del inicio de una operación para desmantelar a un grupo delictivo integrado por brasileños y venezolanos residentes en Roraima, que presuntamente llegó a contrabandear 1,2 toneladas de oro entre 2017 y 2019, equivalentes a 230.000.000 reales brasileños. El grupo delictivo compraba oro extraído por garimpeiros venezolanos y brasileños con la colaboración de un fiscal y una auditora pública, quienes recibían sobornos a cambio de emitir documentos falsos, para certificar la legalidad del oro que luego vendían a través de una empresa radicada en Sao Paulo. Según fuentes de la investigación, el oro presuntamente se exportaba a los Emiratos Árabes y a la India. De acuerdo con la Policía, tan solo en 2018 la compañía investigada exportó más de 1.000 millones de reales en oro, y llegó a triplicar su facturación en los últimos tres años.
Última actualización: 13/04/2023